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En ellos se recrea en el inconsciente colectivo de la Telespaña del siglo XXI: suicidios colectivos frustrados en la provincia de Zamora ("Numancia"), rascacielos incendiados por viejos yuppies en paro ("Los fantasmas del Windsor"), ex-combatientes de la ruta del bacalao que se inmolan en las autopistas ("El orgullo del peatón"), multitudinarias procesiones con velas fuera del calendario de semana santa ("Drama de España"). Todo ello narrado entre el hermetismo, la sorna y la más vehemente convicción revolucionaria ("Tráiganme la cabeza de Teddy Bautista"). Es sin duda un disco para escuchar, leer, pensar y actuar, nada más lejos delas mercancía de fácil consumo a las que estamos acostumbrados en el indie desde que existe tal fenómeno; un plato fuerte, de dura y traumática digestión (tal vez unos garbanzos con callos). Su origen vasco y, en concreto, la margen izquierda del Nervión se dejan sentir desde las citas explícitas a Eskorbuto o su explítica vocación de ser ilegalizado.
Te deberían gustar si te gustan Parade, Sr.Chinarro, Nacho Vegas, Derribos Arias, Surfin Bichos, La mode o Décima Víctima. O quizás no.
En directo, la frialdad tecno del disco se transforma en calidez pop y rabia punk con "El telón de acero", la cada vez mejor ensamblada banda de GGQuintanilla. Desde comienzos de año llevan ya mostrando sus virtudes y sus vicios (muchos más vicios, por su puesto) en los escenarios de Barcelona, Zaragoza o Madrid. Si pasan por tu ciudad no te los pierdas, son la última banda del capitalismo tardío y la primera del socialismo científico, una extraño pliegue temporal, la visión de un futuro que quedó atrás.
En directo, la frialdad tecno del disco se transforma en calidez pop y rabia punk con "El telón de acero", la cada vez mejor ensamblada banda de GGQuintanilla. Desde comienzos de año llevan ya mostrando sus virtudes y sus vicios (muchos más vicios, por su puesto) en los escenarios de Barcelona, Zaragoza o Madrid. Si pasan por tu ciudad no te los pierdas, son la última banda del capitalismo tardío y la primera del socialismo científico, una extraño pliegue temporal, la visión de un futuro que quedó atrás.
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